sábado, 28 de agosto de 2010

Este señor

Creo que si algo me indigna aparte de otros delitos violentos, por supuesto, es el delito de robo perpetrado por aquellos que consiguen un puesto público por obra y gracia de unas elecciones democráticas. Que un representante público se aproveche de su puesto -temporal- para lucrarse, para enriquecerse, para obtener beneficios económicos o de cualquier otro tipo, me parece algo execrable. Repugnante.
Por supuesto, en todo delito, mientras que no hay sentencia firme se presume la inocencia del imputado y no se le puede llamar, por tanto, ladrón. Y no lo haré, ¡faltaría más!
Eso sí, hay un político, que está imputado de ciertos delitos de este tipo, que afirma entre sonrisas y cenas que vuelve a presentarse a las elecciones. Sus jefazos del PP no le apoyan abiertamente, por eso de no caer con todo el equipo si a «este señor» lo juzgan y lo consideran culpable. Pero tampoco lo retiran, por ello de la presunción de inocencia. ¡Faltaría más!
Supongo que «este señor» tiene derecho a presentarse. No lo pongo en duda, en absoluto.
Pero creo que ahora le toca a los ciudadanos decidir en las urnas si desean que nuevamente se siente en la presidencia de su comunidad autónoma o no. «Este señor» afirma categórico -y a mí me resulta desafiante- que a él no hay quien lo mueva...
Me parece que se le olvida que los que tienen la última palabra siempre, siempre, son los ciudadanos que le voten o no. Ni él ni su partido.
Y me encantaría que los valencianos le demostraran en las urnas que a él sí se le mueve. ¡Claro que se le puede mover!
Y, por ahora, nada más.

viernes, 27 de agosto de 2010

En la mina...

No puedo dejar de pensar en los mineros de Chile que están a 700 metros bajo tierra. No puedo quitarme de la cabeza sus rostros llenos de hollín y sus ojos llenos de miedo. No puedo dejar de pensar en que deben de estar ahí metidos durante meses, a oscuras, sin luz de sol, sin aire limpio en sus rostros...
Dicen que está animados y que la esperanza les hace ser optimistas.
Graban vídeos para sus familias en los que les mandan mensajes y les dicen que no penen, que está bien y que no les decae el ánimo.
Debe ser terrorífico estar ahí metidos, presos, sin saber si todo irá bien.
Han recibido ayuda de ingenieros estadounidenses, de la NASA, creo, que estudiarán la forma de vencer los riesgos para poderlos sacar de esa cueva con vida.
Y me viene a la cabeza, sin poderlo evitar, la canción de Víctor Manuel.
Deseo, con todo mi corazón, que puedan salir pronto, que cuanto antes puedan regresar a sus casas, con sus familias y pensar que todo lo sucedido ha sido una mala pesadilla.
Mientras, no puedo dejar de imaginarme sus rostros llenos de hollín, sus ojos llenos de miedo...
Y, por ahora, nada más.

jueves, 26 de agosto de 2010

Me presento...

Este no es mi primer Blog.
No, no está bien empezar por una negación... ¡lo hice otra vez!
Necesito un espacio en el que manifestar mis inquietudes con respecto a cuestiones de la actualidad diaria, que en mi otro blog no tienen cabida por razones evidentes. Visitadlo y lo comprenderéis.
Me preocupan cuestiones de la vida diaria que abarcan tantos temas como granitos de arena hay en una playa.
No sé cómo me irá.
No sé si funcionará o abandonaré por falta de interés o entusiasmo.
Pero lo intentaré. Sí, lo intentaré.
Es difícil lanzarse al vacío sin saber qué hay abajo, si me estrellaré o caeré en un mar cálido y refrescante.
Espero saberlo pronto.
Besos miles
Y, por ahora, nada más